En la vereda de Chella, la pista forestal que discurre desde el Km 16 de la carretera de Benali hasta Chella, se esta realizando en una finca particular una extracción de biomasa. Los pinos se amontonan a los lados del camino para que se sequen y así poder astillarlos allí mismo y transportar la astilla a su lugar de consumo. Muchas veces su lugar de destino es el puerto de Valencia donde la astilla viaja a Italia donde se fabricarán pellets.
El aprovechamiento forestal lo realiza una empresa certificada con una norma ISO y es de suponer que tenga los permisos y el control oportuno.
Nos dicen que la mala gestión forestal esta detrás de los grandes incendios forestales y el despoblamiento de los pueblos de interior (al no haber trabajo en zonas forestales). Nos dicen que los pinos nacen muy juntos, imposibilitando que se hagan grandes y favoreciendo los incendios y que por ello hay que hacer clareos. Todos estos problemas se solucionan con aprovechamientos como la extracción de biomasa .
Hoy os ponemos las fotos de la actuacción que se esta realizando para que cada cual saque sus conclusiones.. En la actuación trabajan dos personas, una en el autocargador que saca los pinos y otra con otra máquina que coje y corta los pinos. El día que hay que astillar viene otra persona que maneja la astilladora. La actuación consiste en sacar todo pino de un diámetro determinado.
La última foto corresponde a una prueba que realizó el ayuntamiento de Enguera dentro del proyecto Life+ “Bioenergy and fire prevention
Interesante charla la que impartió ayer Pablo Talens, ingeniero técnico forestal, en la que habló sin tapujos ni medias tintas de la situación actual de la biomasa, que a día de hoy no es la solución a todos los problemas. Y eso a pesar de que en otros países si se está usando, pero es a base de subvenciones.
Una tonelada de biomasa se paga a unos 30- 35 €, por debajo del coste que supone extraerla del monte, astillarla o empacarla y transportarla.
Pero la verdad es que o toda esa masa vegetal que se genera en nuestros montes la sacamos y la usamos para producir calor o electricidad o la dejamos que se queme en el propio monte. Y al final el coste de la extinción del incendio y los costes de los daños ocasionados en el mismo, seguro que superan en mucho la ayuda administrativa que necesita esta energía.
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