Últimamente se ven por la piscina municipal de Enguera, muchas avispas como la de la foto que debido a sus casi 5 cm de longitud y a sus grandes mandíbulas, no parece muy buena y acaba sucumbiendo a la suela del zapato. Pero hoy uno de los socorristas ha dejado atrás creencias y prejuicios y ha cogido un individuo de esta especie para enseñárnoslo. Al final, el insecto en cuestión es un avispón común, de los nuestros, de los de toda la vida y se llama Megascolia maculata.
A diferencia de lo que se puede pensar al verla por primera vez, M. maculata es prácticamente inofensiva y no ataca al ser humano, a no ser claro está que se sienta amenazada o que sea manipulada.
La hembra de Megascolia busca larvas de coleópteros (escarabajos), fundamentalmente del escarabajo rinoceronte, que se ven bastantes por Enguera. Una vez localiza una larva la aguijonea, paralizándola, deteniéndo su desarrollo y depositándo en ella un huevo de la que emergerá una larva de avispón que se alimentará de la larva del escarabajo.
Podéis ver la forma de las distintas especies de avispa en la siguiente imagen. La vespa velutina es la avispa asiática, que produce muchas bajas entre las abejas.
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Así que a la próxima vez que la veáis no la matéis.
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