El aviso estaba dado pero nadie tomó las medidas a tiempo. Tanto el Ayuntamiento de Enguera como la asociación ecologista local habían solicitado a la Conselleria de Medio Ambiente que limpiara la zona que el pasado martes fue calcinada por las llamas. Las soluciones no han llegado y, según la agrupación que defiende la naturaleza, la suciedad del terreno alentó el fuego.
El aviso estaba dado pero nadie tomó las medidas a tiempo. Tanto el Ayuntamiento de Enguera como la asociación ecologista local habían solicitado a la Conselleria de Medio Ambiente que limpiara la zona que el pasado martes fue calcinada por las llamas. Las soluciones no han llegado y, según la agrupación que defiende la naturaleza, la suciedad del terreno alentó el fuego.
Ambas peticiones de subvenciones se produjeron a principios del presente año. El objetivo era proceder a la ejecución de los trabajos de mantenimiento de los cortafuegos y sus áreas, así como las fajas colindantes. Y es que esta zona está poblada de una gran masa forestal y, por tanto, tiene un alto riesgo de incendio, como así se produjo.
Las agrupaciones ecologistas como Adene y Profer e incluso la de los propietarios de terrenos forestales apuntan a que la zona del siniestro estaba sucia. Situación que, según ellos, se da debido a la falta de inversiones por parte de las administraciones pertinentes.
Ahora parece que hay proyectos en marcha. Sin embargo, ya llegan tarde después de que el fuego arrasara más de 90 hectáreas de pinar y matorrales en Enguera, a sólo tres kilómetros de la pedanía de Navalón. Un siniestro que se dio por controlado sobre las ocho y media de la tarde de ese día, aunque algunas brigadas permanecieron en la zona el miércoles para evitar que el fuego se reavivara.
Según el concejal de Medio Ambiente de Enguera, José Simón, “a principios de año solicitamos una inversión propia de la Conselleria para limpiar la zona y prevenir incendios. Hace unas semanas, nos comentaron que el proyecto sigue en marcha y que, posiblemente, nos la concedan a lo largo de este año”.
El responsable municipal señaló que el área que está ubicada en el Macizo del Caroig posee unas 18.000 hectáreas que son propiedad municipal, una zona muy extensa y que por ello necesita un mantenimiento constante”. La capital de la Canal de Navarrés, apuntó el edil, “es el tercer municipio de España que ha sufrido más incendios en el último siglo”, algo que demuestra que hay que poner medidas en el asunto.
Aspecto que corroboró el presidente de la Asociación para la Defensa de la Naturaleza de Enguera (Adene), José María Simón, quien mostró su insatisfacción ante “el abandono de la sierra de Enguera en el Macizo del Caroig ya que todos los cortafuegos están repletos de matorrales”.
Obras de mantenimiento
Sobre las ayudas de Conselleria, destacó que en febrero, “la solicitamos, ya que no se ha hecho nada, obras de mantenimiento y conservación en esta zona, excepto en la Matea, entre Ayora y Enguera”. Se trata, añadió, de “montes de Utilidad Pública de los territorios de la Redonda, Los Altos y Navalón; con un alto riesgo de incendios”.
Al respecto, indicó que parece que tienen que producirse estos sucesos “para que se adopten medidas y soluciones”. Así, Simón recordó que en 1999 ya se quemaron “unas 3.400 hectáreas, cuya completa extinción costó 1.000 millones de las antiguas pesetas”. La prevención, prosiguió, “resulta más rentable, aunque es más bonito invertir en otros proyectos en lugar de en el monte, que es algo que el público en general no puede ver”.
El presidente ecologista dijo que reclamaron que los trabajos “se hicieran antes de junio para evitar el verano, para lo que bastarían sólo medios mecánicos como tractores oruga, pero aún no sabemos nada del Consell”. Además, explicó que estas obras “deben hacerse todos los años junto con una buena limpieza, por lo que esto sería suficiente para prevenir estas catástrofes como la que vivimos hace unos días”.
Simón lamentó que las ayudas que percibe Adene sean menores cada año, ya que en 2007 “fue de unos 18.000 euros, mientras que en 2008 sólo son 8.500”. Comentó que son “una asociación con muchos medios, sin ir más lejos el martes en el incendio movilizamos a más de 25 voluntarios, equivalente a cinco brigadas. Incluso tenemos nuestro propio parque de bomberos”.
Simón señaló que todos deberían invertir más, incluso el propio Ayuntamiento, ya que el alcalde, Santiago Arévalo, “es el presidente de la Asociación de Municipios Forestales de la Provincias de Valencia, y eso debería notarse”.
Uno de los aspectos que, según el presidente de la Asociación de Propietarios Forestales del Caroig (Afoca), Manuel García, pueden ayudar y mucho a la lucha contra los incendios forestales son “los campos de cultivo”.
La pérdida de estos “es un problema puesto que fraccionaban el territorio y cortaban la progresión de los incendios, que se paraban cuando llegaban a ellos”.
Fuente: Las Provincias
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