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J. L. G., Valencia

La situación que viven actualmente los embalses del Júcar, con el volumen de agua acumulada más baja de los últimos diez años, con 105 hectómetros cúbicos, un 74% menos que la media, no es fruto de la casualidad. Según informó ayer el Ministerio de Medio Ambiente, el porcentaje medio de precipitaciones en la Comunitat Valenciana durante el mes de septiembre ha sido un 12% inferior a lo que se considera normal.

Además, la finalización de septiembre cierra el año hidrológico y los datos de precipitaciones que arroja este ejercicio son de un déficit del 13%. Con lo que se acumula el segundo año de falta de lluvias tras el déficit del 29% del curso hidrológico 2004-2005.Concretamente, la falta de lluvias ha sido especialmente considerable en Alicante, donde el mes pasado hubo un déficit del 97% respecto al promedio habitual. La cara positiva de la moneda se encuentra en poblaciones como Estivella, población en la que las precipitaciones de fin de verano han dejado un superávit del 174% respecto a lo habitual en este mes.
En cuanto a las temperaturas, septiembre tampoco ha favorecido la precaria situación de los embalses de la Comunitat. De hecho, ese mes ha sido un grado más cálido de lo habitual, alcanzando los 24º en Valencia, los 24,3º en Castelló y 24,4º en Alicante. La mayor anomalía se observa, según indica el estudio de centro Meteorológico Territorial en Valencia, en el interior de Castelló, con más de dos grados por encima de lo que se considera «normal». Para sacar el promedio que se considera normal, el ministerio parte de los datos del periodo 1971-2000.

Fuente Levante -Emv