Cristina Narbona reiteró que las obras del trasvase estarán concluidas “antes de 2008”. La ministra subrayó que el tramo 5º está ejecutado en un 91%; el 6º, en un 89%; y el 7º en el 90%. Respecto al tramo modificado (desde el Azud de la Marquesa al Vinalopó) y que ha recibido el respaldo de la Unión Europea que invertirá 120 millones de euros, la ministra dijo que ayer finalizó el plazo para que las empresas presentaran sus ofertas concretas. “A partir de ahí podemos cumplir con el compromiso temporal, pero lo que es más importante”, señaló la ministra, “poder aportar hasta 80 hectómetros cúbicos al Vinalopó, para resolver problemas que están causando una gravísima sobreexplotación de los acuíferos de la zona”.
Narbona reconoció que “no podrá haber trasvases en España de aquí en adelante si no hay un acuerdo social pleno con los usuarios de la cuenca cedente, y eso es exactamente lo que este Gobierno ha conseguido”, en referencia al acuerdo con los regantes del Júcar. La titular de Medio Ambiente aseguró que los trasvases “tienen que ser viables desde el punto de vista técnico, económico y ambiental, pero también desde el punto de vista social”. Narbona enfatizó el respaldo de las instituciones europeas a las iniciativas de su ministerio en materia de recursos hídricos.
La diputada, Juana Serna, admitía en su pregunta que el cambio de nueva toma del trasvase, alternativa a la Cortes de Pallás, causó “una fuerte polémica en Alicante, y algunas organizaciones de agricultores, espoleadas y amparadas por el Partido Popular, se fueron a Bruselas para paralizar este nuevo trasvase”.
El Pais – C.Valenciana.
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