La polémica en torno al trasvase Júcar-Vinalopó vuelve a ponerse de actualidad después de que un nuevo informe ponga en duda la viabilidad técnica del nuevo proyecto. El documento, redactado por el Instituto Tecnológico del Agua de la Universidad Politécnica de Valencia, considera que el calibre de tubería previsto es insuficiente para garantizar el caudal de 80 hm3 anunciado.
El catedrático de Mecánica de Fluidos y director del Instituto Tecnológico del Agua de la Universidad Politécnica de Valencia, Enrique Cabrera, ha remitido un informe al ministerio de Medio Ambiente en el que cuestiona la viabilidad del nuevo diseño del trasvase Júcar-Vinalopó y asegura, basándose en su experiencia en la hidráulica a presión, que de ignorarse sus alegaciones la obra «no podrá cumplir, ni de lejos, el objetivo principal que justifica su construcción: trasvasar desde la cuenca del Júcar a la del Vinalopó un mínimo anual de 70 hm3, sin olvidar el objetivo de llegar, los más de los años, a los 80 hm3».
La alegación de Enrique Cabrera está en sintonía con las voces que desde diversos ámbitos piden que el trasvase se diseñe con cierta holgura tanto para cumplir el objetivo de trasvasar los 80 hectómetros cúbicoscomo el de aprovechar cualquier punta de caudal que se produzca en el río por encima del valor ecológico que se fije para el tramo final del Júcar.
La alegación, que está siendo considerada por Aguas del Júcar, ha sido rechazada por el colectivo Xúquer Viu y la fundación Nueva Cultura del Agua. Los primeros consideran «inaceptable» cualquier aumento en la capacidad de la tubería y los bombeos mientras el consultor y portavoz de la fundación -inspirador además del borrador del anteproyecto que ha servido para licitar la obra, Antonio Estevan- sostiene que los planteamientos de Cabrera nacen del «error» de no considerar la presencia continua en el río de un caudal ecológico de 4 metros cúbicos por segundo.Estevan recordó al respecto que este caudal mínimo es una «condición inexcusable» para que haya trasvase del Júcar al Vinalopó, al tiempo que su estricto cumplimiento por la Confederación Hidrográfica del Júcar es lo que «hace posible» el trasvase al permitir derivar un caudal uniforme y continuado a lo largo del año de 2,6 metros cúbicos por segundo.
Encarecimiento de la obra
Estevan sostiene, además, que la propuesta del director del Instituto Tecnológico del Agua de la Universidad Politécnica y catedrático de Mecánica de Fluidos de aumentar la sección de las tuberías y la capacidad de los bombeos supondría un nuevo encarecimiento de la obra, que se sitúa ya, según las previsiones del ministerio que dirige Cristina Narbona, en torno a 223 millones de euros.
Fuentes de la Plataforma Xúquer Viu aseguraron que no aceptarán la propuesta de Cabrera, aunque sí admiten una ligera modificación encaminada a introducir «variadores de frecuencia», que permiten incrementar la velocidad del agua en los bombeos y de este modo la capacidad de la tubería.
En cualquier caso, el debate técnico y conceptual abierto por este experto en sistemas hidráulicos a presión mantiene en jaque a Aguas del Júcar y a los proyectistas de las empresas que optan a adjudicarse las obras del trasvase.
Fuente: Levante
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