Esta es la extraña imagen que nos encontramos tras la llamada de un vecino de Enguera que nos alertaba de la presencia de un ave en una valla y donde parecía estar enganchado. Al animal costó encontrarlo por el mimetismo con la madera y por la posición anómala que presentaba, más propia de las psitácidas que de las rapaces. Cuando nos acercamos descubrimos que era un mochuelo (athene noctua) con la extremidad izquierda presionada entre la madera y el hierro que la sujeta, sin explicarnos como había llegado a engancharse de ese modo inconcebible. Tras tener que recurrir a una palanca para liberarlo se apreció fractura abierta del tarsometatarso. El animal se trasladó al centro de recuperación de fauna la Granja donde se evaluará la posibilidad de devolverlo a la naturaleza aunque sólo conserve una extremidad.
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