El macho de la pareja de águila perdicera (Aquila fasciata) que críaba en la Canal de Navarrés ha sido encontrado muerto en Carrizosa (Ciudad Real). Este hallazgo ha sido posible gracias a que dicha pareja fue marcada con un emisor radio satélite debido a la evaluación de impacto ambiental que estaba realizando la Confederación Hidrográfica del Júcar, para instalar una presa de laminación en Estubeny, como ya indicamos en su día en esta web. Actualmente el seguimiento lo estaba realizando la Universidad de Alicante, bajo la supervisión del Servicio de Vida Silvestre y la Dirección General de Medio Ambiente.
Según el informe de la UA hasta el mes de octubre del presente año los movimientos de la pareja de perdiceras podían calificarse como normales, sin embargo el macho comienza un desplazamiento lineal que lo lleva hasta la localidad de Carrizosa, donde durante unos días hace movimientos locales que se van restringiendo hasta ser nulos. A la vista de los datos se realiza una vista de campo encontrando al ejemplar muerto y en avanzado estado de descomposición. Ahora toca esperar a que otro macho ocupe su lugar y que la hembra pueda volver a criar en nuestra comarca.
La especie está catalogada a nivel nacional (R.D. 139/2011, Catálogo Español de Especies Amenazadas) y nivel autonómico (Orden 6/2013, que modifica los listados valencianos de especies protegidas de flora y fauna) como vulnerable.
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