Si el otro día fueron unos árboles los que se salvaron del herbicida, hoy ha sido un zorro el que necesitaba nuestra ayuda. El zorro se había caído en el pozo Arriera sito en la zona de la Mota, que tiene una profundidad de unos 8 metros aproximadamente. Para rescatar al zorro se ha necesitado bajar al pozo y echarle una red para evitar mordeduras ante el pánico que tenía el animal. Una vez fuera se ha soltado para que siguiera libre en su hábitat. Muchas veces los zorros se cazan con cepos por competir con los cazadores en la caza de perdices y conejos y otras por entrar en gallineros a llevarse un número importante de aves. Pero ni Rafa, ni Jose Luis ni Jose María ni Enrique podían permitir una muerte tan poco digna a este depredador que simplemente comparte nuestro territorio.
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