El mes de abril, es ese mes donde te puedes encontrar unas formas redondeadas con ojos grandes y anaranjados, por el suelo del monte. Son las crías de búho real (Bubo bubo) que abandonaron el roquedo donde su madre puso los huevos y donde usan su mimetismo con el terreno para pasar desapercibidas. Por ello la importancia de no tocarlos, cogerlos ni molestarlos, si los vemos en nuestros paseos, porque sus progenitores los alimentarán hasta que puedan valerse por si mismo.
Aunque las fotos no son de buena calidad, os queríamos enseñar como son estos fantásticos animales. No vale la pena hacer una foto mejor si eso conlleva el molestar o poner en peligro la integridad de estos polluelos.
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